miércoles, 8 de septiembre de 2010

No vive más

Desperté con la extraña sensación de traer el corazón arrastras, de que el amor no vive más acá, que aquel desengaño dejó un daño permanente e irreparable; en flashazos de memoria, me veo morir en el laboratorio experimental de su sadismo apasionado. Me veo entrar por propia voluntad, le veo envuelto en sonrisas extirpando quien era, de apoco, sin anestesia, uno a uno: mi fe, mi amor, mi alma; son arrancados mientras ríe a carcajadas. Entre frases de: “pronto”, “algún día”, “te extraño”, “seremos”, “haremos”, “estaremos”, “veremos”, hacía remiendos de mi piel.
Me arrullaba con historias del futuro, de un épico amor que llegaría, en la felicidad desmedida que nos envolvería, y al despertar se había marchado con alguien más, con mi ilusión, con el amor que tenía, con los besos, las caricias. Flote entre mis lagrimas, con mi cuerpo de cascarón, nade lejos, y me perdí.
A la distancia recuerdo a la mujer que deje morir, a la que no salve a tiempo, a la inocencia de mi humanidad, a la incondicionalidad del amor; acariciando cicatrices, siento que el amor no vive más. A la distancia soy la mujer que sobrevivió a Satanás.

viernes, 13 de agosto de 2010

¡No! No lo acepto y no lo aceptaré, no puedes venir a decirme ahora que en ocho años de relación, no sabías que eras el amor de mi vida, la persona con quien quería envejecer; ¿acaso creías que estaba contigo por hastío?, o ¿porque esperaba que tu terminarás la relación? o ¿simplemente me quede tantos años a tu lado mientras llegaba alguien mejor? Siempre fui directa y clara con el lugar que ocupabas en mi vida.

Puedes acusarme de ser fiestera, fumadora y chelera, incondicional a los conciertos; fachosa y poco peinada; más adicta al cine que a la marihuana; mal hablada y nada vanidosa; coleccionista de libros viejos y andante sin rumbo; peleonera sin sentido, discípula de Soda Stereo y Cerati, escritora sin futuro; altamente sarcástica y sin un gen de romanticismo; atea y reaccionaria, descoordinada y desmemoriada; fóbica y antisocial, Grungera y con 5 gramos de feminidad en mi cuerpo. Pero te hubiera seguido a donde fueras y nos hubiera defendido de quien fuera, te hubiera amado hasta dejar de usar camisas a cuadros y desechado mis botas de casquillo; te hubiera seguido, posiblemente, en zapatos de tacón. Pero no puedes acusarme de no haberte amado.

¡No! No vengas a decirme que nunca estuviste seguro de lo que sentía por ti, de si era amor o sólo se le parecía. No te atrevas a decir que, en ocho años nunca te ame; insultas mi sensatez y mi recuerdo de ti, prefiero quedarme con ese duro adiós y tus últimas palabras: deje de amarte.

domingo, 8 de agosto de 2010

Alejarme

Al alejarme de ti, sentí que la mitad de mi te seguiría por siempre a los lugares más oscuros de tu vida, sentí que caminaría perdida esperándote de vuelta, sentí que mi corazón tenía incrustaciones de tu maldad; me llore toda la noche, caí dormida, y al abrir mis ojos hinchados, estaba completa, con mi corazón incólume; salió el sol con mis sueños intactos, mi andar es ligero. Pensé que al sacarte de mi espacio desgarraría quien soy, pensé que regresaría a ti sin voluntad, pero no estás más, no lloro más, no dueles más; no eres bueno y nunca lo serás, no soy más adicta a tu maldad.

lunes, 26 de julio de 2010

Indecorosamente

Quizá si somos atrevidos, todo podría suceder entre nosotros, quizá tenemos la medida perfecta del uno en el otro, quizá si te confieso mis deseos al oído, te darás cuenta que se parecen a los tuyos, quizá si me desnudo frente a ti, te darás cuenta que soy más de lo que crees.

Quizá si soy un poco atrevida y te propongo juntar espacios, pegar mi corazón al tuyo, acariciar diferencias, se te sorprenderán las coincidencias; quizá si cerramos lo ojos, las palabras fluirán naturalmente y me confesarás que también me has pensado indecorosamente, quizá si probamos una noche ya no podrás soltarme más, quizá si lo intentamos sabremos que no nos esperábamos y que inesperadamente nos hacemos mejores y nos hacemos felices, quizá sin darnos cuenta, una mañana, sin justificaciones, nos necesitemos, quizá sin querer nos queramos. Quizá sólo te deseo indecorosamente por una noche, quizá te deseo indecorosamente todas mis noches.

martes, 20 de julio de 2010

Baúl

Te guardo en mi baúl de recuerdos favoritos, en él, se encuentra la plaza de armas donde declaraste tu amor por mi, donde conservo los días en que vivimos locamente enamorados, donde abrazo los días que no tuve el valor de seguir amándote, donde viven los días que no existieron entre nosotros, esos días en los que no tengo miedo, ni hay destiempo, donde te encuentro en el lugar y momento correctos, donde abro los ojos y seguimos aquí, tomando café, donde te robo besos de apoco, donde inhalo el olor de tu loción por la mañana, donde no hay final, donde para siempre es real, donde las palabras están de más.

lunes, 28 de junio de 2010

Seamos amigos

Seamos amigos, borremos las cientos de veces que lloré por tu causa, olvidemos las fracturas que ocasionaste a mi corazón, dejemos atrás los insultos y patanerías que tuviste para mi, ignoremos las mentiras que me contaste como verdades, no nombremos a la mujer por la que me dejaste, tampoco a la segunda; llamas y confiesas que no me quieres, que nunca me has querido y que hoy estás seguro que nunca lo harás, pero en tu infinita bondad me ofreces ser amigos; seamos amigos por los viejos tiempos, por la bebida compartida, por las noches sin amor, por los sueños rotos, por mi dignidad pisoteada seamos amigos.

¡Claro! seamos amigos, para sentarme en tu estante de banalidades, aquel donde las mujeres que no amaste se ganaron el derecho a ser amigas y confidentes. Sería mi turno de fingir, te hablaría de lo valioso que eres como persona, que siempre te llevaré en mi corazón y que el karma es sólo una invención; que no hay pasatiempo mejor que comprar sentimientos en cualquier aparador, que el sexo es moneda de cambio, que aparentar es importante, que los amigos vienen y van, que nada es para siempre, que la cobardía es tu mejor atractivo y tu mitomanía envidiable; que velaré tus dulce sueños de Jet Set,. Alabaría tu analfabetismo emocional y tu invalidez intelectual; claro...seamos amigos.

lunes, 14 de junio de 2010

Es tarde ya

Es tarde ya, apenas he dormido, me levanto, aun no amanece y a oscuras salgo de la cama, siento el frío del otoño en mi cuerpo desnudo, la piel se me eriza al poner un pie en el piso, camino despacio, busco mi ropa a tientas, levanto con cuidado cada una de las prendas, como si fueran mis maltrechos sentimientos de tanto lanzarlos contra la pared, mi cuerpo tiembla de vacío, de esta fría historia de desamor, de siempre el mismo final. Me visto y te veo dormir, me recuesto junto a ti para escuchar tu respiración; una vez más llamaste a media noche, una vez más respondí y salí de casa buscándote, una vez más estoy frente a ti, me besas, dices me has extrañado, que me piensas más de lo que creo, me besas y me venzo ante el deseo de esta vez creerte, de esta vez sentirte, de que esta vez no mientas. Y al terminar entre tus sabanas se que es verdad, que estoy aquí sin razón, tu cuerpo ha dejado de hacerme sentir y mi amor quedo en pedazos al estrellarse en tu almohada, estoy aquí ante tu fijación infantil de sólo poseer, aquí avergonzándome de mi, sabiendo que persigo una falacia, que me condeno a repetir el mismo final de tu silencio e indiferencia. Es tarde ya, salgo a pie juntillas, descalza, con frío, con miedo de regresar, de hacerme adicta a tu juego de reglas no escritas, me siento en la calle esperando mi taxi, enciendo un cigarrillo, es tarde ya para quererte, para creerte, es tarde ya para un nuevo final; salí de tu cama, de tu casa y de tu vida en completo silencio, sin final, sin adiós... es tarde ya.

lunes, 31 de mayo de 2010

Exorcismo

Llevo meses caminando del lado opuesto a tu vida, para borrar mi rastro cambie de piel, me vestí de otro color, corte mi cabello, me tatué un símbolo de protección; he dejado de creer que eres humano, te convertiste en Satanás, te mudaste al barrio de lo insustancial donde devoras almas sin saciarte. A veces te siento caminando detrás de mí, quieres enfrentarme con mi lado más cobarde, agazapado en la oscuridad esperas un descuido para mostrarte, para mirarme con tu peculiar compasión ofensiva, como si fuera un cachorro abandonado, como si mi vida valiera un centavo, con esa petulancia que te caracteriza, quieres hacerme creer que eres lo mejor que me ha pasado, apareces con tu sonrisa afable para contarme la razón de tu desamor, que no eres culpable de romper mis entrañas, que sólo fingías suponiendo que no dolía, que una fuerza extraña te obligo a matar mi ilusión, que me lacerabas porque desarrollaste afecto a mis heridas, que el sabor de mis lágrimas saciaban tu sed, que si resisto un poco más y hasta el final simularás olvido y devolverás la parte amputada de mi corazón. A veces creo escucharte susurrando que me extrañas, que tienes lugar en el sótano de tus deseos para mi, que echas de menos el olor de mi sufrimiento, que hay tiempo para abrir una llaga más.
A veces creo vas a alcanzarme antes de terminar el exorcismo, a veces siento llegarás antes de que se apague la hoguera de mis naves, antes de resucitar mi maltrecha alma, antes de reivindicar mi carne y mis huesos; me aferro a quien soy, me miro al espejo para saber que estoy y que tu no existes más.

miércoles, 19 de mayo de 2010